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De pesca con el pato FSV 170

El FSV170 es uno de los patos con mayor aceptación por los apasionados a la pesca de spinning y cola de rata que quieren probar nuevas sensaciones.

Y es que este pato lo tiene todo. La calidad de sus materiales de fabricación (PVC de doble capa de 0.9mm. y 1000 deniars poliéster) le hacen ser un pato muy resistente a los golpes, rozaduras y la abrasión (el sol, el salitre y la humedad). Sus soldaduras y estructura adhesiva están hechas totalmente reforzadas y a mano. Cuenta además con 5 años de garantía y 3 en las soldaduras. Tiene dos cámaras de aire independientes con válvula de seguridad así como un suelo y un asiento hinchables de gran comodidad. Una gran zona de carga tras el asiento nos permite depositar mucho material como mochilas, material de pesca, una nevera…. Dispone de una barra delantera que equilibra el pato y además nos puede servir como apoyo y dispone de una útil bandeja de tela y escala de 50cm. para medir nuestras capturas. En los laterales tenemos dos bolsillos de gran capacidad para tener a mano nuestros señuelos de pesca por ejemplo, y contamos con remos para un desplazamiento más rápido cuando así lo necesitemos. Puede soportar 160 kg. de carga y su peso es de 10 kg. Unas correas situadas bajo el suelo, que podemos quitar y poner, nos permitirán transportar a la espalda el pato por nosotros mismos, muy útil para acceder a las zonas de embarque.

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Lo positivo de pescar en pato

Porque el único punto negativo que podemos poner a practicar la pesca con pato es la poca rapidez en los desplazamientos, algo lógico, pues no está diseñado para ello y si lo que buscamos es ir con prisas y llegar rápidos a los puntos de pesca, mejor será una embarcación o un kayak.

El pato es para disfrutar en silencio, inmersos en plena naturaleza.

Para estar en contacto directo con el agua y los peces, y para batir zonas concretas de pesca, aunque sin duda los que estén más en forma podrán recorrer muchas millas. Se exige estar mínimamente en forma para aletear y moverse mucho y no quedarse pescando en zonas muy reducidas, pues trabajaremos muchos músculos y articulaciones de las piernas (tobillos, rodilla, gemelos, abductores, sóleo…) e incluso los brazos ya que con los remos también ejercitaremos nuestros músculos.

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En acción de pesca tendremos una visión muy elevada ya que el asiento nos permite estar sentados cómodamente a una buena altura, ideal para la pesca con mosca y a spinning, muy al contrario por ejemplo de algunos kayaks donde la pesca se vuelve algo más incómoda, sobre todo si utilizamos cañas de una longitud superior a los 2.20 metros que cuentan con un talón más largo y desde pato lanzaremos con gran comodidad. Y todo lo tendemos totalmente a mano y de fácil acceso durante la jornada, tanto en el espacio tras el asiento como en los bolsillos laterales, así como en todos los complementos que queramos montar en el pato para la colocación de cañas, sonda, cámaras de audio y vídeo. No tendremos problemas de estabilidad y mientras seamos cautelosos con los anzuelos de nuestros señuelos, podemos pescar sin miedo alguno sobre estos fantásticos artilugios flotantes.

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Pescar en compañía nos permitirá realizar mejores fotografías y pasar jornadas de gran diversión.

Pesca en agua dulce

El pato tiene mucho recorrido entre los pescadores de bass americanos.

Y aunque le costó entrar en nuestro país, ahora las aguas dulces son territorio pato. Y es que, ya sea en ríos (donde incluso podemos hacer descensos), lagos o embalses, siempre hay una zona donde echar nuestro pato para pasar una buena jornada de pesca. Con él tentaremos a los bass, lucios, percas y luciopercas en los embalses, pescando en completa armonía con el medio natural, o las truchas en algunos lagos y embalses pirenaicos, pero…¿quién se resiste a un buen descenso tras colosos como el siluro? ¿O a pescar ríos enmarañados tras grandes lucios? Siempre hay una aventura y retos que cumplir con un pato. Está claro que un tranquilo embalse es el lugar idóneo donde pescaremos plácidamente pero si actuamos con cabeza y sin correr peligro, no hay lugar imposible para la pesca desde float tube.

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En el mar

En el mar la cosa cambia y su uso no es tan habitual, aunque la tendencia dice que cada vez más pescadores se animan a ello. Aquí sí debemos extremar más las precauciones y saber exactamente los puntos por los que entrar y salir del agua sin peligro (ojo a las zonas de playa) y estar muy al tanto de las previsiones meteorológicas, pero siempre actuando con buen criterio tenemos muchas zonas para batir sin problemas.

Desembocaduras, grandes bocanas de puertos, calas rocosas, espigones, bahías someras serán los lugares perfectos.

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Y son muchas las especies que buscar, ya sea tanto a mosca como a spinning. Desde anjovas y palometones, a lubinas, o depredadores en pajareras. La diversión está asegurada. Incluso podemos practicar plácidamente el eging tras sepias y pulpos o rockfishing en zonas de roca tras sargos, doradas, obladas, serranos y una gran variedad de especies que habitan en la roca, que nos lo harán pasar en grande. Más cómodas resultan las bahías por ejemplo, donde tentar lubinas a top water y los amantes de las emociones fuertes lanzarán en zonas de playas con salidas de agua dulce, sus poppers tras la caza de grandes anjovas.

Si aún no te has hecho con un pato… ¿A qué esperas? Hazte ya con tu FSV 170 Y VIVE MULTITUD DE AVENTURAS.

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